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George Temperley: Emprendedor, fundador y visionario
Por Rolando Ríos
15 de Noviembre de 2021
A modo de introducción
Dicen Jorge N. Gualco y Alberto S. J. de Paula en "Temperley, su historia y su gente":
"Cuando las vías del Ferrocarril Sud dividieron en dos su chacra, Jorge Temperley se dio cuenta que el fin de una época se acercaba y comenzaba otra, que era la de la civilización y el progreso.
Decide entonces fraccionar sus terrenos y solicitar al ferrocarril la instalación de una nueva estación. A pesar de su amistad con los principales funcionarios del Ferrocarril Sud, esta empresa no mostró interés en instalarla debido a que estaría a sólo diez cuadras de la de Lomas de Zamora, mientras que la siguiente, que era la Estación Glew, estaba a 14 kilómetros de distancia. Para justificar su petición, ofrece la venta total de todos sus terrenos, la donación de los ladrillos para que los compradores construyan sus casas, y finalmente, construir la nueva estación por su propia cuenta. Esta nueva proposición fue finalmente aceptada por el Ferrocarril Sud.
El 16 de octubre de 1870 se realizó el remate que, según los anuncios, decía: “venderemos a la más alta postura y sin retirar, los 139 lotes de terreno marcados en el plano, garantimos al público que la posición de los terrenos es de lo más lindo y lo más pintoresco y alto de Lomas. Hay grandes poblaciones alrededor y son los terrenos de más porvenir que haya en el Sud, distando ocho cuadras de la otra estación. El dueño tiene que vender infaliblemente a cualquier precio por contrato obligatorio con la compañía del Ferrocarril Sud (garantido). Tren expreso gratis ida y vuelta. Sale de la estación Lima a las 10.30 AM y el viaje dura media hora. Almuerzo a las once. Remate a las doce. Planos en las casas de los rematadores, Victoria 143. Rodríguez Larrazábal y Cía.”
El remate fue un éxito porque el lugar era una zona alta, muy poblada de árboles y cerca de una estación ferroviaria próxima a inaugurarse, lo que lo convertía en un lugar ideal para viviendas suburbanas.
Poco tiempo después las propiedades se iban a valorizar rápidamente, debido a la fiebre amarilla que asoló a Buenos Aires y que provocó un importante éxodo hacia el interior. En esa oportunidad, George Temperley participó activamente en las comisiones populares de ayuda, colaborando incluso con fondos de su propio peculio."
Primera Estación Temperley, 1871
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1. Tres hermanos emigran a la Argentina
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Foto de época de Newcastle upon Tyne, ciudad natal de George Temperley. Créditos de la imagen: www.francisfrith.com
Nació con el nombre de George Temperley Allison en Newcastle upon Tyne, Tyne and Wear, conocida habitualmente como Newcastle, en el nordeste de Inglaterra, el 10 de Octubre de 1823.
Sus padres también eran ingleses. Su padre, John Temperley Askew había nacido cerca del 4 de mayo de 1794 en Hunstanworh, y era el sexto de nueve hermanos. Su madre era Margaret Allison, y se casaron el 2 de mayo de 1822 en Stanhope, Durham, Inglaterra. El matrimonio tuvo tres hijos: William Temperley Allison, nacido en Durham en 1823, Emily y George Temperley Allison.
Los tres hermanos Temperley Allison llegaron a la Argentina en 1842, cuando George tenía 18 años, radicándose todos en la ciudad de Buenos Aires.
George comenzó a trabajar en un almacén de ramos generales, y cuando éste cerraba sus puertas, cargaba un par de caballos y por su cuenta ejercía el comercio en la campaña.
2. Las dos esposas de Temperley
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El Symmetry of Scarborough arribó a Buenos Aires proveniente del puerto de Leith, Escocia, el 11 de agosto de 1825. A bordo venían 220 pasajeros con destino a la colonia escocesa de Santa Catalina, y los padres de las 2 esposas que George Temperley tuvo.
Las curiosidades históricas se hacen presentes a cada paso en nuestra historia, y el capítulo que se ocupa de la vida y obra de George Temperley, también las tiene.
El 11 de agosto de 1825 había llegado a la Argentina un barco, el Symmetry of Scarborough, fletado por John y William Parish Robertson y comandado por el Capitán Smith. Entre los pasajeros de ese viaje que había partido del puerto de Leith en Escocia, estaban los 220 escoceses que conformarían la Colonia Escocesa Agrícola de Santa Catalina (hoy Llavallol).
Pero también venían los padres de las 2 esposas que George Temperley tuvo.
En efecto, George Knight, inglés, nacido en 1796 en Londres, y Eleonor Proctor, ya casados, habían embarcado con destino a la Argentina, junto con sus dos hijas mayores. Ya en Buenos Aires, tuvieron a Carlota y Carolina, las esposas de George.
Es curioso que el contacto con George Temperley cambiaría para siempre el curso de la historia familiar los Knight Proctor, ya que cuando nació el pueblo de Temperley, eligieron este lugar para pasar el resto de sus vidas.
El 17 de febrero de 1846 George Temperley se casó con Carlota Knight Proctor, argentina, hija de George Knight y de Eleonor Proctor, nacida en Buenos Aires el 6 de abril de 1827. La ceremonia se llevó a cabo en la iglesia anglicana de San Juan Bautista de Buenos Aires. Carlota falleció prematuramente a los 23 años el 23 de febrero de 1851, a solo 3 días del nacimiento de su tercera hija, Carlota, por fiebre escarlatina que afectó a madre e hija. Lamentablemente tampoco pudo sobrevivir su pequeña hijita, quien falleció con solo 16 días de vida. Carlota fue sepultada en el antiguo Cementerio Británico, hoy Plaza 1° de Mayo (entre Alsina, Yrigoyen, Pichincha y Pasco). Al trasladarse el cementerio a la Chacarita, su lápida se amuró a una de las paredes que circundan el predio. Le sobrevivieron sus hijos Emilia (1847-1935) y Juan Enrique (1849-?) Temperley Knight.
Hacia 1847 ya había realizado grandes progresos y se dedicaba a la exportación de lanas y frutos del país, e importaba ropa de confección que vendía en su comercio ubicado en Cangallo 62 de la ciudad de Buenos Aires (numeración antigua).
Desde sus inicios le preocupó la cosa pública y lo que ocurría en el país donde había decidido vivir. Así podemos constatar, que junto con un importante grupo de comerciantes británicos entre quienes se encontraban Cranwell, Thompson, Tomkinson, Chapman, Green, Eastman, Stegman, Kiernan, Hargraves, etc., enviaron una petición el 23 de Octubre de 1848 a Don Juan Manuel de Rosas, aclarando que lo hacían con absoluta prescindencia política y en nombre de parte de la colectividad inglesa, para que no renunciara, porque consideraban beneficiosa su permanencia en el poder al frente de los destinos de la Nación.
En 1851, contrae nuevas nupcias con su cuñada Carolina "Caroline" Knight Proctor, argentina al igual que su hermana, nacida en Buenos Aires el 4 de agosto de 1826. Esta vez la ceremonia se desarrolló en la iglesia católica San Pedro Telmo de Buenos Aires, bendiciendo la misma el Reverendo Antonio Fany. Este matrimonio fue particularmente prolífico en hijos, pues tuvo 10. Así nacieron: Francisco Llewellyn (1851-?), Jorge (1852-?), Enrique Alisio (1854-1890), Catalina del Sagrado Corazón de Jesús (1856-?), Alicia Carolina (1860-1891), Ana Constanza (1862-?), Carlos Alberto (1864-?), Florencia (1869-?), Alberto Eduardo (1871-?) y Alfredo Carlos (1876-1921), todos Temperley Knight.
3. Con la mirada puesta en el sur
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A manera de brindar contexto, en 1852 se divide el partido de Quilmes, que había sido creado en 1784, debido al crecimiento poblacional, creándose el partido de Barracas al Sud (hoy Avellaneda), que incluía los terrenos desde el Riachuelo hasta la actual Adrogué, incluyendo a las actuales ciudades de Llavallol, Temperley y Turdera.
El 23 de noviembre de 1854, Bartolo, Juan y Carlos Marenco (h), hijos y herederos de Carlos Marenco y Feliciana San Martín, vendieron a George Temperley una chacra en las Lomas de Zamora, de 1.000 varas de frente al sudoeste (hoy Calle Dorrego) por 1.150 varas (996 metros) de longitud, extendida hasta la actual avenida Almirante Brown hacia el nordeste, y desde el camino de Monte Grande a Quilmes (hoy avenida 9 de Julio-Eva Perón) por el sudeste, hasta la actual calle Lavalle por el noroeste. En la escritura respectiva, labrada ante el escribano Victoriano Vila, cuyo registro se conserva en el Archivo General de la Nación, se aclaraba que este terreno “...era el último resto del que en mayor porción de varas les correspondió por muerte de su finada madre”.
La venta que a George Temperley hicieron los hermanos de Marenco de ese último resto de su herencia, incluía “...las poblaciones, plantas, y demás que sea anexo y le pertenezca, con más una carreta, cinco bueyes y cuatro caballos”. Allí construyó Temperley su quinta, conforme a la costumbre de hacerse residencias suburbanas y/o semicampestres, introducida en Buenos Aires y sus alrededores por las colectividades británica y estadounidense.
Si bien la chacra de Santa Catalina (en la actual Llavallol) de los hermanos Robertson “no tenía rival en el Río de la Plata” —según la opinión del diario inglés The Standard—, y la quinta de Henry Bell con sus 203 hectáreas era la más grande de Temperley, la de George Temperley tuvo la importancia de constituirse en el origen de un nuevo pueblo.
Temperley realizó en su propiedad una gran forestación con eucaliptus, araucarias, robles, cedros, paraísos y árboles frutales, convirtiéndola en poco tiempo en un verdadero vergel.
En un manual turístico de la época se decía lo siguiente: “Una de las más importantes quintas de Lomas de Zamora es la de George Temperley, situada alrededor de media milla de la Estación Lomas. La casa y jardines de excelente buen gusto, forman una de las residencias más hermosas de los suburbios de la capital. Debido al ferrocarril, Temperley ha vendido a numerosos comerciantes ingleses y americanos que han establecido allí su residencia de campo. Cerca del pueblo se encuentran las propiedades de Green, Drabble, Griggs, etc. (que eran directores del F.C.S.) Al este del ferrocarril, en medio de avenidas sombreadas y espesuras, está el Hotel de la familia Kidd, donde los enfermos viajeros pueden pasar una semana en un típico hogar inglés. Los señores Henry McKern y otros han comprado y abierto un nuevo hotel inglés.”
La casa principal de la quinta de George Temperley estaba ubicada a pocos metros de la actual calle Nóbrega (que entonces era un sendero interno) y Gral. Paz.
La casona era cuadrada, con galerías en los cuatro costados y tenía un gran parecido con la de Marcó del Pont que estaba ubicada en Sixto Fernández e Hipólito Yrigoyen. Tenía 15 habitaciones, aljibe, noria y depósitos de agua de hierro y demás dependencias. El cuarto de baño tenía piso y pileta de mármol y también tenía cochera con caballerizas y ocho piezas de servicio. La quinta estaba totalmente cercada. Además del parque, había árboles frutales y viñedos, al mismo tiempo que una pequeña bodega donde elaboraban vino.
La Quinta Presidencial de Temperley, residencia de Nicolás Avellaneda, se asentó en la propiedad de George Temperley, y funcionó entre 1877 y 1880.
Carta de Lectores (1858)
Sres. Redactores de La Tribuna.
Ruego a Vds. la inserción de lo siguiente:
S. S. S.
Dionicio Mirazo
El miércoles como á las cinco y media de la tarde mientras se hallaba D. Pedro Montenegro comprando alguna ropa en lo del Sr. Temperley teniendo á la puerta un caballo de mi propiedad como y igualmente el apero avaluado como en siete mil pesos, que había prestado a dicho Sr. Montenegro, un impávido ladrón montó en él y salió á trote largo.
Visto que fue, el sirviente del Sr. Temperley le siguió gritando atajen al ladrón, hasta el mismo Mercado del Plata sin poder darle caza pues no encontró en todo ese trayecto un solo gendarme, mientras el Sr. Montenegro y un dependiente de la casa ropería se dirigían á la Policía solicitando un vijilante para irlo á seguir.
Pero en vano, el negligente comisario que se hallaba de guardia con toda flema constestóles: ahora es muy tarde esperen Vds. hasta mañana.
Vaya una salida la del infatigable guardián de los intereses del pueblo; si era ya tarde media hora después del suceso, no es claro que más tarde sería al día siguiente?
Ahora bien, asi que supe que la policía no daba auxilio, me dirigí a casa del Sr. Comisario Pico (de quien debía tomar lecciones el anterior), y aunque estaba algo enfermo se levantó de la cama y me prestó toda clase de auxilios, mediante los cuales tengo esperanza de atrapar al ladrón.
Dejando así enterado al público y al Sr. jefe de Policía de un hecho que no debe ignorar, y no sabiendo; el nombre del comisario de guardia para publicarlo y para recomendar más su actividad y buen tino, me repito de Vds.
S. S.
Dionicio Mirazo
La Tribuna, Bs. As.
22. X. 1858.
4. Emprendedor entusiasta
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George Temperley fue accionista y organizador en la construcción del primer Teatro Colón, frente a la Plaza de Mayo de Buenos Aires, inaugurado en 1857.
Al emprenderse la construcción del Teatro Colón de la ciudad de Buenos Aires, que se encontraba ubicado frente a la Plaza de Mayo donde actualmente está la casa central del Banco de la Nación Argentina, fue accionista y uno de los más entusiastas organizadores. El primer Teatro Colón se inauguró el 27 de abril de 1857 con la representación de La Traviata de Verdi.
En la Primera Exposición Rural realizada en 1858 en el Jardín Florida (situado entonces en Florida y Paraguay), presentó ejemplares y ganó medallas de plata por gallos, gallinas y faisanes criados en su quinta de Temperley.
El aspecto religioso de la población y su educación siempre estuvieron presentes en sus actividades. Cuando en 1860 se decide la construcción del templo parroquial de Lomas de Zamora, George Temperley, junto con Esteban Adrogué, Rúa, Ramírez, Casalins, Correa, Bookey y de los Santos, formaron la Comisión Promotora para la construcción del templo. También participó en la larga lista de donantes, junto con Esteban Adrogué, Roque Esteves Correa, Francisco Portela, Evaristo Grigera, Jaime Casalins, Laureano Ramírez, Enrique Ochoa, Tomás Portela y otros.
Después de que Bartolomé Mitre colocara la piedra fundamental del templo de Nuestra Señora de la Paz, el 16 de diciembre de 1860, se decidió que la administración de las obras quedara a cargo de Esteban Adrogué y George Temperley. Entre los domicilios que recibieron donaciones, estaba el de Temperley, en Cangallo 80, Capital Federal.
Pero George Temperley ya tenía la mirada puesta en el sur. Es así como participa activamente en la división del partido de Barracas al Sud (Avellaneda), que había sido creado en 1852 por la división del partido de Quilmes, para crear el partido de Lomas de Zamora en 1861. En el movimiento autonomista participan también Esteban Adrogué, Francisco Portela, A. Somellera (descendiente colateral de Juan Zamora), A. Lanús, Roque Esteves Correa de la actual Temperley, Patricio Bookey, propietario de Santa Catalina de la actual Llavallol, entre otros.
Tuvo una activa participación en la construcción de la primera escuela de varones de Lomas de Zamora, que fuera inaugurada en 1861 y cuyo primer director fue Pedro White. Formó una comisión de vecinos, para lograr las contribuciones que finalmente posibilitaron la construcción de la misma. Las obras se ejecutaron bajo la dirección de George Temperley y Esteban Adrogué. Poco después participó en el gobierno municipal de Lomas de Zamora y en 1864 fue el presidente del Concejo Municipal. Nuevamente lo integra en 1866 con Juan Cotti y Esteban Adrogué.
En 1865, junto con Armstrong, Patricio Peralta Ramos, Hugo Bunge, Alfredo, Eduardo y Jorge Lumb, Alejo Arocena, Federico Wauklin y Alejandro Sívori, entre otros, fundaron la primera compañía de seguros "La Estrella S.A.", que es la más antigua del país.
El 10 de Julio de 1866 se reunió junto con José T. Martínez de Hoz, Eduardo Olivera, Lorenzo F. Agüero, Ramón Viton, Francisco Madero, Ricardo Newton, Leonardo Pereyra, Mariano Casares, Jorge Stegman, Luis Amadeo, Claudio Stegman y Juan Fernández, y resolvieron la fundación de la Sociedad Rural Argentina, en la cual integró su Comisión Directiva desde 1866 hasta 1869.
Fundadores de la Sociedad Rural Argentina
Firmas del Acta de Fundación de la Sociedad Rural Argentina, ocurrida en 1866. La tercera firma de la segunda columna pertenece a George Temperley
George Temperley colaboró económicamente con la construcción de la Iglesia Anglicana Holy Trinity (Santísima Trinidad) en Cerrito y Av. Almirante Brown, Lomas de Zamora
5. Forjador del nacimiento de un pueblo
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Plano del loteo fundacional de la ciudad de Temperley
La época era más que propicia para inversiones inmobiliarias a gran escala en la zona. Especialmente después de las epidemias de cólera (1867-8) y fiebre amarilla (1871) hubo un movimiento de los residentes británicos con medios suficientes hacia los barrios periféricos. También, este movimiento de residentes británicos hacia los suburbios está relacionado con el desarrollo de los ferrocarriles.
Los primeros fraccionamientos hechos por George Temperley, no eran aún lotes urbanos sino parcelas de vastas dimensiones para las grandes quintas que, edificadas con todo su perímetro libre y rodeadas de enormes y frondosos parques, caracterizaron una época en la historia lugareña, no demasiado lejana en el tiempo, pero sí en la realidad de la vida cotidiana, ya que después, al acentuarse el proceso de urbanización, disminuirían gradualmente las medidas de las parcelas, hasta llegar a los “chalets” y los “chalecitos” entre medianeras que configuran el paisaje urbano de nuestros días.
Cuando las vías del Ferrocarril Sud dividieron en dos su chacra, George Temperley se dio cuenta que el fin de una época se acercaba y comenzaba otra, que era la de la civilización y el progreso.
Decide entonces fraccionar sus terrenos y solicitar al ferrocarril la instalación de una nueva estación. A pesar de su amistad con los principales funcionarios del Ferrocarril Sud, esta empresa no mostró interés en instalarla debido a que estaría a sólo diez cuadras de la de Lomas de Zamora, mientras que la siguiente, que era la Estación Glew, estaba a 14 kilómetros de distancia. Para justificar su petición, ofrece la venta total de todos sus terrenos, la donación de los ladrillos para que los compradores construyan sus casas, y finalmente, construir la nueva estación por su propia cuenta. Esta nueva proposición fue finalmente aceptada por el Ferrocarril Sud.
Poco tiempo después las propiedades se iban a valorizar rápidamente, debido a la fiebre amarilla que asoló a Buenos Aires y que provocó un importante éxodo hacia el interior. En esa oportunidad, George Temperley participó activamente en las comisiones populares de ayuda, colaborando incluso con fondos de su propio peculio.
La comunidad inglesa de Buenos Aires estaba perfectamente informada del remate y se pudo observar que entre los primeros compradores estaban Powell, Maclean, Hart, Devitt, Livingston, Folmar, Brown, Jacobs, Murray, Steward, Younger, Jones, Thomas, Gregory, Knight, Tornquist y otros, que con sus chalets de típico estilo inglés, le dieron su característica tan particular.
El 16 de octubre de 1870 se realizó el remate que, según los anuncios, decía: “venderemos a la más alta postura y sin retirar, los 139 lotes de terreno marcados en el plano, garantimos al público que la posición de los terrenos es de lo más lindo y lo más pintoresco y alto de Lomas. Hay grandes poblaciones alrededor y son los terrenos de más porvenir que haya en el Sud, distando ocho cuadras de la otra estación. El dueño tiene que vender infaliblemente a cualquier precio por contrato obligatorio con la compañía del Ferrocarril Sud (garantido). Tren expreso gratis ida y vuelta. Sale de la estación Lima a las 10.30 AM y el viaje dura media hora. Almuerzo a las once. Remate a las doce. Planos en las casas de los rematadores, Victoria 143. Rodríguez Larrazábal y Cía.”
El remate fue un éxito porque el lugar era una zona alta, muy poblada de árboles y cerca de una estación ferroviaria próxima a inaugurarse, lo que lo convertía en un lugar ideal para viviendas suburbanas.
La primera estación de ferrocarril fue construida a la altura de la calle General Paz e inaugurada el 1° de enero de 1871. En esa época, había una sola vía donde circulaba el tren y otra auxiliar. Circulaban dos trenes por la mañana y otros dos por la tarde. De noche no lo hacían por razones de precaución y porque prácticamente no había pasajeros. La compañía quiso ponerle el nombre de George Temperley a la estación, pero éste sólo aceptó Temperley a secas.
George Temperley no consultó a las autoridades municipales para el proyecto del nuevo pueblo que nacería a raíz del fraccionamiento de sus tierras. La voluntad de formar un pueblo no solamente estaba muy clara en la venta de sus tierras, sino que, como se puede ver en el plano adjunto se encuentra el espacio perfectamente delimitado para construir una plaza pública.
También contribuyó pecuniariamente en la construcción de la iglesia anglicana "Holy Trinity" (Santa Trinidad), ubicada en la Av. Almirante Brown y Cerrito, Lomas de Zamora, en el año 1872, para beneficiar a las colectividades británicas de Temperley y Lomas de Zamora.
George Temperley era fundamentalmente un productor agropecuario, y tenía un campo en Brandsen de tres cuartos de legua cuadrada, en el cual tuvo 20.000 lanares, cuando se produjo la venta del mismo en 1873.
Plano catastral de 1896, de Mariano Barilari
Cuando se realizó en 1875 la Primera Exposición organizada por la Sociedad Rural, Temperley expuso, junto con Newton, Krabbe, Fair y otros, sus caballos de carrera. También expuso 18 vacas de raza Durham pura, de padre y madre ingleses, de 7 años. Esta exposición la inauguró el Presidente de la Nación, Nicolás Avellaneda, quien 2 años más tarde le iba a comprar a Temperley su famosa quinta.
En 1877 el casco de la quinta de George Temperley fue adquirido por Nicolás Avellaneda, presidente de la Nación, que estaba casado con Carmen Nóbrega. Así, la propiedad fundacional de la ciudad se convirtió en la Quinta Presidencial de Temperley.
Sus suegros, Eleonor Proctor y George Knight eligieron vivir y fallecieron en el pueblo de Temperley, creado por su yerno, en abril de 1884 y el 21 de enero de 1890 respectivamente.
El 12 de diciembre de 1886 falleció su hermano William, en la ciudad de Buenos Aires, a la edad de 63 años. Estaba casado con Helena M. Graham Adams (1844-1903) con quien tuvo 5 hijos: Guillermo José, Eduardo, Roberto, Juan Enrique y Alberto Temperley Graham. De ellos, Guillermo José fue conocido como empresario en el área de Mar del Plata, especialmente por ser el propietario del Hotel Victoria.
Aljibe de la propiedad que perteneció a George Temperley y posteriormente a Nicolás Avellaneda, sobre la calle Nóbrega, en 2010. Fotografía: TemperleyWeb
George Temperley era un hombre típico de empresa que no se limitó al cruzamiento del ganado criollo con animales de pedigree, sino que también se preocupó de vincularse y favorecer todas las actividades referentes al campo, integrando también en varias oportunidades el directorio del Banco de la Provincia de Buenos Aires.
Asimismo participó en infinidad de entidades empresariales, financieras, pero también se ocupó de actividades culturales, religiosas, educativas, y de bien, cuya suma lo muestra en su verdadera dimensión y lo convierte en un pionero de su época.
George Temperley falleció a la edad de 76 años, el 25 de Junio de 1900. Su esposa Carolina "Caroline" Knight Proctor le sobrevivió hasta el 4 de octubre de 1907. La pareja hoy descansa en el Cementerio de la Recoleta, de la ciudad de Buenos Aires.
Nicolás Avellaneda le compró la propiedad a George Temperley y la convirtió en la Quinta Presidencial de Temperley
Lápida de George Temperley en el Cementerio de la Recoleta
Compilación
Rolando Ríos
Imagen de George Temperley proporcionada muy gentilmente por Felipe Vilella, descendiente de George Temperley
Fuentes
Gualco, J. N. y De Paula, A. S. J. Temperley, su historia y su gente. Ed. Pleamar, 3ra.ed.1992
Genealogía Familiar. Sitio de genealogistas de Argentina, en https://www.genealogiafamiliar.net/index.php
Flores, Roberto Dante. Familias británicas en la Sociedad Rural Argentina, 1866-1912. USAL, Épocas – Revista de Historia, No.3, diciembre de 2010.
Genealogía Irlandesa en Argentina, en https://www.genealogiairlandesa.com/
Santa Trinidad, Lomas de Zamora. Registros parroquiales, 1874-1915, en http://www.argbrit.org/LdeZ/LdeZintro.html
The Nautical Magazine: A Journal of Papers on Subjects Con-nected with Maritime Affaires, Volume 12. Brown, Son and Fer-guson, 1843.
TemperleyWeb, Archivo y notas varias.
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