TEMPERLEYWEB > Historia > Investigaciones históricas

Nicolás Avellaneda y la Quinta Presidencial de Temperley

Por Rolando Ríos

5 de Junio de 2018

Quinta Presidencial de Temperley, hogar del presidente Nicolás Avellaneda | Infografía TemperleyWeb
Quinta Presidencial de Temperley, hogar del presidente Nicolás Avellaneda | Infografía TemperleyWeb
Nicolás Avellaneda, vecino de Temperley
Nicolás Avellaneda, vecino de Temperley

La residencia presidencial

La actual Quinta Presidencial de Olivos es resultado de una donación de Carlos Villate Olaguer del año 1918. Con anterioridad a esa fecha, los presidentes argentinos eligieron su lugar de residencia mientras ejercieron la primera magistratura del país.
Nicolás Avellaneda había nacido en Tucumán en 1836, y era hijo de Marco Avellaneda, decapitado por un lugarteniente de Rosas, y de Dolores Silva Zavaleta.
Asumió la Presidencia de la Nación el 12 de Octubre de 1874, cuando tenía 38 años de edad.
Cuenta Felipe Pigna que Avellaneda fue el gran promotor de la inmigración, la universidad pública y la federalización de Buenos Aires.

La Quinta Presidencial de Temperley

En 1877, cuando su gestión presidencial había superado la primera mitad y en procura de posibilitar para su familia y para sí algunos momentos de descanso, fuera del viejo caserón de la Plaza de Mayo, decidió comprar a George Temperley su quinta en la localidad que este último había fundado recientemente.
Jorge Gualco y Alberto de Paula, en su libro "Temperley, su historia y su gente" hablan de esta propiedad como la "Quinta Presidencial de Temperley" a partir de este momento.
La casa con sus jardines y el parque, tenía el peculiar aspecto de una villa italiana con ambientación inglesa. El predio abarcaba varias manzanas de la actual traza urbana de Temperley, entre la Avenida Meeks y las calles Guido, Liniers y General Paz.

Quinta Presidencial de Temperley | Mapa Rolando Ríos
Quinta Presidencial de Temperley | Mapa Rolando Ríos

Mapa actual que muestra el área que ocupaba la Quinta Presidencial de Temperley

La primera estación Temperley se ubicaba sobre la calle General Paz, cuya vecindad con la finca la hacía cómodamente accesible desde Buenos Aires, mediante el tren que en la cabecera de Plaza Constitución, prepararían para tan distinguido pasajero y su presidencial comitiva.
El portón principal estaba sobre la calle General Paz, a unos 120m de la Avenida Meeks. Un sendero interior pasaba por delante del frente de la casa, orientado al este y cuyo portal daba acceso a un amplio zaguán y, a través de él, a la gran sala de recibo.

Lo más visto

Estaba cercado en casi todo su perímetro, con alambrado y cerco vivo, la entrada principal era de rejas, encuadrada entre fuertes pilares de mampostería.
La casa tenía 2 patios pero, a diferencia del esquema claustral del rectángulo rodeado de habitaciones sobre sus 4 lados, éstos se situaban sobre 3 de esos lados, dejando el cuarto lado abierto al parque circundante. Así, el patio principal, liberado de su hipotética ala norte, adoptaba la forma de "U", cuyos brazos eran la sala y el comedor, en tanto que el tramo transversal quedaba ocupado por los 6 aposentos y sus dependencias. El patio de servicio, en cambio, se abría hacia el oeste y quedaba rodeado por la cocina y la despensa (adyacencias del comedor) y por las habitaciones del fondo.

El interior : La sala y el comedor

Tanto la sala como el comedor eran ambientes amplios, de 8,50 x 4,30m aproximadamente cada uno, con sus cielorrasos revestidos de lienzo y muros bellamente pintados. Cada uno tenía 5 ventanales, 3 en forma de "bay window", sobre el extremo norte.
El mobiliario tenía cierto carácter informal, ya que el piso de madera de la sala se cubría de una estera y, aunque tenía una consola con su gran espejo dorado, un retrato con marco dorado, y un juego de sofá con 2 sillones, había también una silla hamaca de paja, 2 sillones y 2 sillas del mismo material, 5 sillas de esterilla, una mesa central de "papier maché" y otra metálica para el jardín, así como 2 pequeños armones de cañón.
Se iluminaba con una araña de querosene de 2 luces, 3 candelabros metálicos para 3 velas cada uno y varias palmatorias de loza.
El comedor, como correspondía a la numerosa familia del Presidente y a sus frecuentes visitas, tenía una mesa de caoba para 12 personas, con su aparador de caoba y mármol. Pero el centro de este salón lo ocupaba una pequeña "mesa de centro" de mármol, complementada con un sofá de caoba y un sillón hamaca de caoba, y una mesa de ajedrez, entre otros muebles.
Tenía también el comedor una estufa de chimenea con hogar de mármol y su correspondiente espejo, un reloj de pared, una araña de 2 luces, candeleros con fanal y una vajilla que, entre otras piezas, incluía 2 docenas de platitos de cristal para helados, lo cual, en aquella época, constituía un insólito lujo veraniego.

Los aposentos

En el aposento del Doctor Avellaneda había cama-camera de roble, con su mesa de luz y el lavatorio con su piedra de mármol y su juego de jarra, palangana, y demás enseres de porcelana. Había además un sofá, un sillón y 2 sillas, de caoba. Tenía este aposento un amplio ventanal y medía 5,20 x 4,30m. Tenía como anexo un cuarto de vestir, de 2,20 x 4,25m, con un ropero norteamericano de 3 cuerpos, otro lavatorio con su taburete, un tocadorcito, una mesita de pino con juego de dominó, y varias sillas.
En otra habitación, tenía el Doctor Avellaneda su escritorio de caoba con tintero de alabastro. Había en la casa varios cuadros, algunos de ellos dibujados a pluma pero, lamentablemente, su identificación no ha llegado hasta nosotros.

Las dependencias

También tenía un juego de cricket, varias sillas de montar, un coche "break" con cristales y 2 caballos.
Toda la casa estaba rodeada por una amplia galería perimetral, hecha con esbeltas columnas metálicas. Había también una gran cantidad de muebles metálicos para jardín y bancos de madera. Una parra crecía junto al frente, al este de la casa, al igual que varios naranjos en el patio.
La casa se abastecía de agua mediante un aljibe con su brocal de mampostería y reja de hierro, y el depósito subterráneo con sus cañerías, robinetes, y demás elementos usuales.
Tenía también un cuarto de baño de madera, con su tina de zinc, perchas y sillas, y 2 retretes, uno interior y otro exterior, con puertas y asientos de madera.
En otro pabellón se hallaban las caballerizas y cocheras, los alojamientos para el quintero y el cochero, y los depósitos para herramientas, útiles y enseres. Había en ella un pozo de balde para obtener agua de napa, con su correspondiente piletón. La quinta tenía además 2 gallineros y gran cantidad de árboles frutales y de adorno.

Carmen Nóbrega Miguens, la Primera Dama

Carmen Nóbrega, esposa de Nicolás Avellaneda
Carmen Nóbrega, esposa de Nicolás Avellaneda

Carmen Nóbrega Miguens nació el 16 de Julio de 1836 y era hija del portugués Juan Nóbrega, degollado durante el gobierno de Juan Manuel de Rosas, y de Julia Miguens Balderas.
Contrajo matrimonio con Nicolás Avellaneda el 23 de Octubre de 1861, con quien tuvo 12 hijos: María Dolores Mónica, María del Carmen Juana, Juliana Catalina, Nicolás Fermín, Marco Manuel (foto), Nicolás Abraham (foto), María Victoria Damasia (foto), María Mercedes María del Pilar Alejandrina Clotilde, Eduardo León Carlos, Manuel Víctor Lorenzo y Martín Juan Francisco. Todos de apellido Avellaneda Nóbrega.

Marco Manuel Avellaneda, Nicolás Abraham Avellaneda y María Victoria Avellaneda
Marco Manuel Avellaneda, Nicolás Abraham Avellaneda y María Victoria Avellaneda

Hoy probablemente haya temperlinos que no sepan que las calles Avellaneda y Nóbrega llevan esos nombres, no por el capricho municipal, sino en recuerdo de don Nicolás y doña Carmen, aquel matrimonio presidencial que allí mismo disfrutó de Temperley y lo prestigió, con su ejemplo de conducta, de moral privada y pública.

Muerte prematura

Cuando dejó la Presidencia de la Nación en 1880, Nicolás Avellaneda fue elegido Rector de la Universidad de Buenos Aires y, al año siguiente, Senador Nacional por Tucumán. Enfermo del "Mal de Bright", hizo en 1885 un viaje a París, en un intento de curarse mediante un tratamiento médico que no dio el ansiado resultado. Emprendió entonces el regreso, falleciendo en el barco que lo traía, frente a la isla uruguaya de Flores, el 25 de Noviembre de 1885, cuando recién había cumplido 49 años de edad.
Aunque descendía de una noble familia provinciana, Nicolás Avellaneda no fue en lo personal un hombre de gran fortuna. Logró lo que suele llamarse un "buen pasar" pero, como su vocación política era auténtica y honrada, sus intereses fueron más bien los de su patria y no los de su bolsillo.

La demolición de la Quinta Presidencial

Al fallecer Nicolás Avellaneda en 1885, su esposa heredó la propiedad y a la muerte de la misma, 5 años después, 9 de sus hijos la heredaron en condominio. En 1920 Marcelo Avellaneda loteó la quinta y se abrieron las calles Nóbrega y Espora, que hasta ese entonces eran internas de la propiedad. Los 75 lotes resultantes se vendieron a pagar a 2 años sin interés.
El año anterior a la realización del loteo Ángel Luquet había participado en la demolición de la casa y un año después Rimoldi, quien era el principal alambrador de Temperley, abrió las calles y fijó los límites de los lotes.
Las carretas que pesadamente se llevaban los enormes eucaliptus recién talados, ponían fin a una parte importante de la historia de Temperley.
Hoy, el solitario aljibe que se encuentra en una propiedad privada sobre la calle Nóbrega es el último vestigio del desaparecido caserón señorial.

Recuerdos de familia

Sor María Victoria Avellaneda (ver foto más arriba), una de sus hijas, que profesó como religiosa en la Basílica del Sacré Coeur de París, y pasó su ancianidad en el convento de la congregación en Washington, recordaba hacia 1950 aquella forestación que, para entonces, ya había sido talada, así como la casa demolida, al escribir: "El ombú me trae queridos e íntimos recuerdos. En nuestra Quinta de Temperley había uno con un banco alrededor. En general nos sentábamos por la tarde, especialmente cuando esperábamos gente de la ciudad, pues estábamos muy cerca de la estación del tren... Añoranzas... Far away and long away... y ya han sonado mis ochenta años..."
Sor María Victoria Avellaneda había nacido en 1871. Tomó los hábitos en 1900, y fue la última de los 12 hermanos en fallecer, en 1955, extinguiéndose con ella la descendencia de primera generación de Nicolás Avellaneda y Carmen Nóbrega.
No nos cabe duda que fue en esta perfumada y luminosa casona temperlina, confortable sin lujo, especialmente sin el opresivo y oscuro lujo porteño del 1880, digna y alegre a la vez, donde el Doctor Nicolás Avellaneda pasó junto a su familia, los mejores momentos de su breve, brillante y atormentada vida.

Aljibe de la Quinta Presidencial de Temperley
Aljibe de la Quinta Presidencial de Temperley

El Aljibe de la Quinta Presidencial

El terreno donde se encontraba la propiedad de George Temperley se extendía desde Almirante Brown hasta Dorrego y desde Juncal-Lavalle hasta Pasco-9 de Julio, y el nuevo propietario lo había adquirido a los hermanos Marenco el 23 de Noviembre de 1854. Temperley realizó una gran forestación con eucaliptus, araucarias, robles, cedros, paraísos y árboles frutales, convirtiéndola en poco tiempo en un verdadero vergel.

Cuando el ferrocarril dividió en 2 sus tierras, Temperley se dio cuenta que el fin de una época se acercaba y comenzaba otra, que era la de la civilización y el progreso. Fue así como el 16 de Octubre de 1870 realizó el remate de 139 lotes de su propiedad, dando origen con este hecho, a la actual ciudad de Temperley.

Para sí mismo, George Temperley guardó el predio ubicado entre las actuales calles Meeks, Liniers, Guido y General Paz. La casa principal de la quinta estaba situada a pocos metros de la actual calle Nóbrega (que entonces era un sendero interno) y General Paz. La casona era cuadrada, con galerías en los cuatro costados, y tenía un gran parecido con la de Marcó del Pont que estaba ubicada en Sixto Fernández e Hipólito Yrigoyen. Tenía 15 habitaciones, aljibe, noria y depósitos de agua de hierro y demás dependencias. El cuarto de baño tenía pisos y pileta de mármol, y también tenía cocheras con caballerizas y ocho piezas de servicio. La quinta estaba totalmente cercada. Además del parque, había árboles frutales y viñedos, además de una pequeña bodega donde elaboraban vino.

En 1877, el casco de la quinta fue adquirido por el Presidente de la Nación Nicolás Avellaneda, quien estaba casado con Carmen Nóbrega, y ejerció la primera magistratura del país entre 1874 y 1880. De esta manera, y por espacio de poco más de 3 años, la propiedad se convirtió en la Quinta Presidencial de Temperley (Gualco, J. N. y De Paula, A.).

Aljibe de la Quinta Presidencial de Temperley | Foto Rolando Ríos 7/12/2010
Aljibe de la Quinta Presidencial de Temperley | Foto Rolando Ríos 7/12/2010

Al fallecer Nicolás Avellaneda en 1885, su esposa heredó la propiedad y a la muerte de la misma, 5 años después, sus 9 hijos la heredaron en condominio. En 1920 Marcelo Avellaneda loteó la quinta y se abrieron las calles Nóbrega y Espora, que hasta ese entonces eran internas de la propiedad. Los 75 lotes resultantes se vendieron a pagar a 2 años sin interés.

El año anterior a la realización del loteo Ángel Luquet había participado en la demolición de la casa y un año después Rimoldi, quien era el principal alambrador de Temperley, abrió las calles y fijó los límites de los lotes.

Las carretas que pesadamente se llevaban los enormes eucaliptus recién talados, ponían fin a una parte importante de la historia de Temperley.

Nuestra foto, tomada el 7 de Diciembre de 2010, evoca un solitario aljibe que en una propiedad privada sobre la calle Nóbrega. Es el último vestigio del desaparecido caserón señorial. Este aljibe es, de alguna manera, el símbolo de Temperley, por haber prevalecido frente al paso del tiempo y por su significado relacionado a la vida.

Compilación

Rolando Ríos

Fuente principal

Temperley, su Historia y su Gente. Jorge N. Gualco y Alberto S. J. de Paula. Ed. Pleamar, 3ra.ed. 1992.

Bibliografía complementaria

Quinta Presidencial de Olivos (Wikipedia)
Felipe Pigna - Nicolás Avellaneda
GenealogíaFamiliar.net: Nicolás Remigio Aurelio Avellaneda Silva
GenealogíaFamiliar.net: Carmen Nóbrega

Vea también

George Tmeperley BiografiaGeorge Tmeperley Biografia
El aljibe de la Quinta Presidencial de TemperleyEl aljibe de la Quinta Presidencial de Temperley
Historia de TemperleyHistoria de Temperley
El tren en TemperleyEl tren en Temperley

¿Querés saber más?

Cronología históricaCronología histórica
Investigaciones históricasInvestigaciones históricas
VecinosVecinos

Seguinos

TemperleyWeb

Sitio web dedicado a las ciudades de Llavallol, San José, Temperley y Turdera

Si pasa en tu ciudad, te pasa a vos

Fundado el 25 de Mayo de 2000